Los gatos en la magia
No solo en la religión católica se otorgan poderes mágicos a los gatos, pues mucho antes, en la mitología celta nórdica, se contaba una leyenda acerca de un gato negro que arrebataba las almas de los difuntos. De esta narrativa surgió el ritual del velatorio, donde se iluminaba el cuerpo con velas para protegerlo de ser llevado por el gato y así resguardar su alma.
En la antigua civilización egipcia, el amor por los gatos alcanzaba niveles divinos. La cultura y mitología egipcias demostraban un profundo respeto hacia estos seres, tanto así que algunos de sus dioses manifestaban rasgos y personalidades felinas. Los gatos eran los fieles acompañantes de los faraones y eran reverenciados por todos los habitantes del antiguo Egipto. De hecho, aquellos que se atrevían a dañar o matar a un gato podían enfrentar consecuencias desafortunadas y ser sometidos al mismo destino.