La radiestesia es la facultad que posee un ser humano para percibir radiaciones mediante el uso de artefactos sencillos. El cuerpo humano, puede percibir ondas o radiaciones generadas por otros cuerpos, estos cuerpos pueden ser de diferentes índoles y naturaleza.
La radiestesia es un fenómeno conocido desde hace muchos siglos, se cree que tiene alrededor de 4000 a 5000 años, hay testimonio que la ubican en la Alemania del siglo XV cuando es utilizada como la conocemos actualmente. La génesis de su nombre es Rabdamancia que viene del griego y significa adivinación por medio de una vara. Los practicantes de la Radiestesia eran llamados Zahoríes.
Fue utilizada para la localización de aguas corrientes, vetas de minerales entre otros. Los Zahories con una rama en forma de Y o un péndulo detectaban estas radiaciones; por varios años estas prácticas fueron consideradas diabólicas y sus practicantes perseguidos. En la primera y segunda guerra mundial fueron usados radiestesistas para localización de submarinos y bases enemigas, en la detección de minas explosivas, pero los equipos de medición electrónica fueron desplazando a los radiestesistas.
Para el año de 1933 en París fueron convocados por la academia de medicina especialistas en diferentes ramas de la ciencia y concluyeron que todos los seres vivos, animales, plantas, minerales u objetos fabricados por el hombre, generaran energía de diferentes niveles y características, estas pueden medirse e identificarse por color o forma. Esto dio para que fuera cambiando el nombre de Rabdomancia por Radiostesia que quiere decir percepción de la radiación.
La forma mas utilizada es para encontrar:
- -Agua, minerales, petróleo, también puede determinarse la dirección en la que fluyen los líquidos y su cantidad o espesor.
- -Líneas geopáticas de stress.
- -Objetos perdidos.
- -Medición de campos auricos o chakras individuales.
Sujección y equilibrado de varillas de radiestesia
La posición de preparado:
Mantenga las varillas con firmeza, pero dejándoles libertad de movimiento, con el dedo índice a 1 centímetro de la parte superior de las asas. Si las varillas no tienen asas debe sujetarlas lo justo para mantener su control, pero dejándolas girar con facilidad.
Sujete una varilla en cada mano, alejadas de su cuerpo, con los brazos doblados en ángulo de 90 grados, las varillas deben apuntar a la lejanía, y estar paralelas al suelo, la posición inicial le recordará a un pistolero. Para evitar un excesivo movimiento brusco de sus varillas, puede apuntar muy ligeramente hacia abajo, al principio le será más sencillo estabilizar el movimiento de las varillas si apoya sus codos en su cintura.
Determinación de la posición de hallazgo:
Antes de empezar su actividad debe decidir si cuando encuentre su objetivo las barras se cruzarán, formando una X, o bien si las barras se separarán, abriéndose y quedándose en esa posición, formando una linea recta. Con estas nociones, es hora de empezar a practicar….