Ziva, Živa, llamada también Živena. Su nombre deriva de la palabra žiť (vivir) o život (vida). Es la diosa de la vida, de la curación, de la resurrección, también de la cosecha y de la primavera o del verano, se identifica con la tierra.
Es una de las diosas más controvertidas de la mitología eslava. La actitud hacia ella fue diferente, por un lado, era considerada un símbolo de fertilidad y cosecha, y por otro lado, era considerada la reina del frío, la oscuridad y el invierno. También apareció en el papel de la dueña de la muerte y fue considerada la diosa patrona de la brujería, la dueña del cementerio.
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En la tradición ucraniana, Zhiva es una hermana gemela de Morana, su" otra cara ", ya que ninguna puede existir sin la otra. Su flor sagrada es el bígaro, símbolo de la vida eterna.
El Día de Zhiva se celebra tradicionalmente a principios de mayo, cuando el cuco comienza a llamar en los bosques y arboledas. La celebración va precedida de la limpieza de la casa y el patio. A veces, en la víspera del día de Zhiva o en el mismo día de Zhiva, los maestros caminaban alrededor de su campo en un círculo, "encerrándolo" en un círculo protector. Se encendieron fuegos en las esquinas del campo para proteger los brotes de los espíritus malignos. Por la noche, se encendían hogueras en las cimas de las colinas y las riberas de los ríos. La gente cantaba y bailaba en horovod. Muchos saltaron por encima de la hoguera: “Quien salta alto se despide de la muerte prematura”. Las hogueras estuvieron encendidas hasta la mañana siguiente.
Hoy en día, muchas tradiciones del Día de Zhiva se olvidan, sin embargo, a medida que los días se vuelven cálidos, muchos se dirigen a la naturaleza, a sus casas de verano donde descansan o cuidan su propio jardín, disfrutando del sol y la vegetación fresca después de los fríos días de invierno.
Atiendela con Aguamiel, vodka, sahúmala con Salvia, y romero, ofrécele pescado ahumado envuelto en hojas de lombarda.